jueves, 25 de octubre de 2007

Drink team XXII - Los Hincreíbles: 2 - 7

Pabellón Dominicos
Sábado 20/10/2007
21:00 horas
Goles: Vali, Sergio
Asistencias: Vali
Jugaron: Aitor, Fernando, Jose Mari, Dj, Sergio, Jorge, Vali
Seguramente el peor partido en liga del Drink team en los últimos tres años lo cual es preocupante porque la misma sensación o parecida sacamos del partido inmediatamente anterior con el agravante de que casi unánimemente nos parece peor equipo los Hincreíbles que Electricidad Español, sin que esto signifique hacerlos de menos, que tienen un buen equipo. La impresión es que los equipos que han subido este año de tercera están a un buen nivel y terminarán en buenas posiciones si nada se les tuerce.

Como ya había ocurrido en partidos anteriores se nos acumularon los problemas: Pablo en Madrid, Luis no jugó porque se le había olvidado el equipaje, Alberto no pudo venir, Jorge con los mareos de la muerte y José Mari recién salido de una lesión. A perro flaco todo son pulgas y en este comienzo de temporada el perro se parece mucho al lindo pulgoso. Se nota mucho también porque las malas sensaciones nos afectan psicológicamente desde el minuto uno. Un detalle: los goles en contra fueron cayendo uno tras otro y se asumían casi con naturalidad, como aceptando que era lo que tenía que pasar.

Cuando un equipo no funciona no funciona y se nota en todo. La esperanza el saber que la temporada anterior empezamos igual y remontamos y la seguridad de que somos mucho mejores de lo que estamos demostrando. Es cuestión de tiempo que nos recuperemos, pero de momento vamos dejándonos puntos y bajando posiciones y ya somos el último clasificado con lo que recuperar puestos será complicado.

En la primera parte el partido anduvo igualado e incluso nos adelantamos con un penalti de Vali. El problema fue que en la jugada inmediatamente posterior ellos empataban y cinco minutos después ya se ponían por delante de forma demasiado fácil, mientras que a nosotros nos costaba muchísimo generar ocasiones claras.

En la segunda parte el partido acabó en seis minutos en los que nos metieron tres goles, casi todos a la contra y empujando sobre la línea o con tiros relativamente claros. Nos vuelve a ocurrir que nuestra presión no es la que era y que los repliegues cuando nos roban el balón no son contundentes y ellos juegan sus contras casi a placer. Se comentó al final de partido retroceder líneas para acortar la distancia a correr en defensa, al menos hasta que las cosas mejoren.

Una pena porque los Hincreíbles acudieron con algunas bajas importantes y era la ocasión para haberles ganado y haber entrado en la liga. A diferencia del partido que tuvieron con el Vaticano, con el que perdieron en la segunda parte, esta vez sí se impusieron un mejor físico, cosa que precisamente es la que más ha de preocuparnos.