TORNEO FIESTAS DELICIAS 2007PABELLÓN LA BOMBARDA
Sábado 15/09/2007
10:30 horas
Jugaron: Aitor, Sergio B., Rigui, Capi, Sergio D. Fco, Antonio, Rubén, Héctor, Víctor
Goles: 3 Antonio, 2 Víctor, Rubén, Héctor
Asistencias: 2 Antonio, 2 Víctor, Héctor, Capi, Aitor
Invitados por el Bar OTO nos presentábamos al TORNEO DE LAS FIESTAS DE LAS DELICIAS como comparsas, avisados de que participaban equipos de superior nivel a nosotros. Las únicas bajas la de Roberto, lesionado y en Nueva York y la de Edgar en Madrid.
Antonio se unió a nosotros desde Madrid y Víctor, Aitor y yo llegamos desde Gallur. Todo el equipo afrontaba la semifinal con la confianza de una de las mejores pretemporadas que hemos hecho nunca y con la esperanza de hacer un buen papel. Se notó enseguida, todos estábamos metidísimos en el partido desde el primer minuto y se observó especialmente en defensa, nuestra mejor virtud, donde todo el equipo estuvo impecable.
Gracias a la grabación de Vero he podido estudiar el partido al milímetro y debo decir que será difícil que mejoremos el juego de equipo que mostramos. Si acaso puede mejorarse la aportación de cada uno a nivel individual (es decir, más acierto, más velocidad, más contundencia, mejor disparo...cada uno su punto débil que ya sabemos todos cuál es el nuestro), pero a nivel colectivo el partido fue inmejorable. Estudiando las estadísticas hasta el más mínimo detalle sorprende comprobar que el 87% de las intervenciones fueron acertadas, que se robaron muchísimos balones en defensa o que el porcentaje de acierto de cara al gol fue de un 23%, que está muy bien.
Ellos tenían un buen equipo, equilibrado es quizás el calificativo que mejor los define. No había tochos y tampoco grandes figuras (quizás el nº 9 arriba era el más desequilibrante), todos la tocaban y se movían bien en el campo. Quizás les faltó acierto o un punto más de forma física, el caso es que en todo el partido llegaron sólo 17 veces a tirar y de ellas sólo 10 fueron a puerta acabando dos en gol (en un córner y una falta) y las otras ocho paradas por un destacado Aitor. Pienso que es más mérito nuestro y de nuestra actitud defensiva puesto que no pudieron llegar con claridad en ningún momento. La culpa es de nuestra concentración, de nuestra defensa en nuestro campo, de los continuos cortes de los que están atrás y de las buenas ayudas que hacen los que juegan más adelantados.
Por otro lado pocas veces hemos exhibido tan buena selección en movimientos y pases. Todos sin excepción elegíamos la mejor opción, soltábamos el pase y buscábamos desmarque y eso es muy molesto para un equipo que defiende porque si no se organiza para las marcas siempre quedan hombres sueltos. Es lo que les ocurrió en los goles, casi todos jugadas rápidas de dos o tres pases iniciadas desde atrás que les pillaban sin organizar su defensa.
La primera parte estuvo muy igualada y terminó uno a uno. En el minuto tres se adelantaron con un remate en un córner en el que no anduvimos finos en las marcas (uno de los problemas que llevamos tiempo tratando de corregir). Lejos de venirnos a bajo o ponernos nerviosos seguimos igual y tras un robo de Rigui que hizo bueno Víctor metiendo el cuerpo ante un rival y amagando un tiro que convirtió en pase al área, Antonio empujaba a pocos metros de la línea de gol.
Para mi gusto fue una primera parte prácticamente perfecta en la que nuestro juego colectivo estuvo a un altísimo nivel, simplemente no entraron los balones que sí lo hicieron en la segunda mitad.
La clave del partido fueron seguramente los cinco primeros minutos tras el descanso. La factura de los goles muy similar: primero un pase en largo de Antonio que Víctor controla a la vez que orienta y cuela por el palo largo a la media vuelta (golazo que nadie se esperaba); después una contra iniciada por Aitor que con un pase en largo dejó a Antonio y Víctor contra un solo defensa y que el primero culminó y en el minuto cuatro más de lo mismo, pero con los papeles cambiados y con Víctor empujando el pase de Antonio. Era un 4 a 1 inapelable y se hizo de forma tan fácil que visto parece sencillo.
El único momento en que tenemos dudas nos las provocamos nosotros mismos. Ellos aciertan en una falta con cierta suerte a colarnos el 4 a 2 en el minuto diecisiete y en ese momento nosotros mismos nos ponemos nerviosos. No había razón para alarmarse dado como estábamos jugando, pero el miedo a perder enloquece un poco nuestra posición en el campo y ellos se crecen. La zozobra dura poco porque cuatro minutos después Aitor encuentra de nuevo a Antonio y éste se saca de la manga un jugadón y marca el 5 a 2. El partido está acabado sobretodo porque se templan los nervios y nuestro juego y en los últimos minutos marca Rubén un golazo a pase de Héctor en contraataque iniciado por Sergio Baleta y el propio Héctor en tiro desde fuera del área a pase de Capi.
La sensación final la de haber hecho un magnífico partido y la confianza de que todavía podemos hacerlo mejor. El ambiente era inmejorable para jugar la final.
Antonio se unió a nosotros desde Madrid y Víctor, Aitor y yo llegamos desde Gallur. Todo el equipo afrontaba la semifinal con la confianza de una de las mejores pretemporadas que hemos hecho nunca y con la esperanza de hacer un buen papel. Se notó enseguida, todos estábamos metidísimos en el partido desde el primer minuto y se observó especialmente en defensa, nuestra mejor virtud, donde todo el equipo estuvo impecable.
Gracias a la grabación de Vero he podido estudiar el partido al milímetro y debo decir que será difícil que mejoremos el juego de equipo que mostramos. Si acaso puede mejorarse la aportación de cada uno a nivel individual (es decir, más acierto, más velocidad, más contundencia, mejor disparo...cada uno su punto débil que ya sabemos todos cuál es el nuestro), pero a nivel colectivo el partido fue inmejorable. Estudiando las estadísticas hasta el más mínimo detalle sorprende comprobar que el 87% de las intervenciones fueron acertadas, que se robaron muchísimos balones en defensa o que el porcentaje de acierto de cara al gol fue de un 23%, que está muy bien.
Ellos tenían un buen equipo, equilibrado es quizás el calificativo que mejor los define. No había tochos y tampoco grandes figuras (quizás el nº 9 arriba era el más desequilibrante), todos la tocaban y se movían bien en el campo. Quizás les faltó acierto o un punto más de forma física, el caso es que en todo el partido llegaron sólo 17 veces a tirar y de ellas sólo 10 fueron a puerta acabando dos en gol (en un córner y una falta) y las otras ocho paradas por un destacado Aitor. Pienso que es más mérito nuestro y de nuestra actitud defensiva puesto que no pudieron llegar con claridad en ningún momento. La culpa es de nuestra concentración, de nuestra defensa en nuestro campo, de los continuos cortes de los que están atrás y de las buenas ayudas que hacen los que juegan más adelantados.
Por otro lado pocas veces hemos exhibido tan buena selección en movimientos y pases. Todos sin excepción elegíamos la mejor opción, soltábamos el pase y buscábamos desmarque y eso es muy molesto para un equipo que defiende porque si no se organiza para las marcas siempre quedan hombres sueltos. Es lo que les ocurrió en los goles, casi todos jugadas rápidas de dos o tres pases iniciadas desde atrás que les pillaban sin organizar su defensa.
La primera parte estuvo muy igualada y terminó uno a uno. En el minuto tres se adelantaron con un remate en un córner en el que no anduvimos finos en las marcas (uno de los problemas que llevamos tiempo tratando de corregir). Lejos de venirnos a bajo o ponernos nerviosos seguimos igual y tras un robo de Rigui que hizo bueno Víctor metiendo el cuerpo ante un rival y amagando un tiro que convirtió en pase al área, Antonio empujaba a pocos metros de la línea de gol.
Para mi gusto fue una primera parte prácticamente perfecta en la que nuestro juego colectivo estuvo a un altísimo nivel, simplemente no entraron los balones que sí lo hicieron en la segunda mitad.
La clave del partido fueron seguramente los cinco primeros minutos tras el descanso. La factura de los goles muy similar: primero un pase en largo de Antonio que Víctor controla a la vez que orienta y cuela por el palo largo a la media vuelta (golazo que nadie se esperaba); después una contra iniciada por Aitor que con un pase en largo dejó a Antonio y Víctor contra un solo defensa y que el primero culminó y en el minuto cuatro más de lo mismo, pero con los papeles cambiados y con Víctor empujando el pase de Antonio. Era un 4 a 1 inapelable y se hizo de forma tan fácil que visto parece sencillo.
El único momento en que tenemos dudas nos las provocamos nosotros mismos. Ellos aciertan en una falta con cierta suerte a colarnos el 4 a 2 en el minuto diecisiete y en ese momento nosotros mismos nos ponemos nerviosos. No había razón para alarmarse dado como estábamos jugando, pero el miedo a perder enloquece un poco nuestra posición en el campo y ellos se crecen. La zozobra dura poco porque cuatro minutos después Aitor encuentra de nuevo a Antonio y éste se saca de la manga un jugadón y marca el 5 a 2. El partido está acabado sobretodo porque se templan los nervios y nuestro juego y en los últimos minutos marca Rubén un golazo a pase de Héctor en contraataque iniciado por Sergio Baleta y el propio Héctor en tiro desde fuera del área a pase de Capi.
La sensación final la de haber hecho un magnífico partido y la confianza de que todavía podemos hacerlo mejor. El ambiente era inmejorable para jugar la final.
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