Pabellón SaldubaSábado 12/05/2007
18:00 horas
Goles: 2 Héctor, Rubén
Asistencias: Héctor, Rubén, Roberto
Jugaron: Aitor, Roberto, Sergio, Tony, Héctor, Rubén
Primer partido de Copa con un Artipyme dispuesto a hacer cosas importantes. El primer paso era ganar este partido contra el equipo con el que, en teoría, íbamos a jugarnos la clasificación. Volvía Rubén de Afganistán con un buen trancazo que lo dejaba algo “tocado”, teníamos varias bajas importantes (Edgar, Capi, Rigui y Víctor) y Sergio Baleta jugaba casi simultáneamente con la Campana y sólo podía intentar venir a la segunda parte....al final ni llegó. Tuvimos que llamar a Tony para completar el equipo con al menos un cambio.
Como bien dice Rigüi el fútbol es “un estado de ánimo” y Artipyme después de un final de liga sensacional con siete victorias consecutivas habíamos jugado un play off mediocre en ataque, sin suficiente gol (la ausencia de Rubén se notó en exceso) así que presentarnos a este partido “en cuadro” provocó quizás demasiados recelos y un exceso de precaución. La consigna era meternos atrás y salir a la contra y nos topamos con un equipo al que esto le venía muy bien.
El peso del partido lo llevaron ellos, que eran quienes tocaban, quienes nos hacían correr, quienes tenían la posesión. Inicialmente eso nos venía bien, siempre lo ha hecho, porque cuando cometen un fallo nuestras contras son letales pero en esta ocasión no fue positivo porque no perdían el balón y nos desgastaban física y mentalmente.....la tónica en todos nosotros era saber que éramos superiores, pero esperando “nuestro momento” fue pasando el tiempo hasta que ya no hubo.
Otra ventaja con la que contaron fue la de ir siempre por delante en el marcador. En el minuto 3 se ponían por delante y marcaban ya la tónica de todo el partido pues repitieron en el doce y en el seis de la segunda parte, siempre para sacarnos un golito. Sólo tiraron cuatro veces a puerta, pero cada vez que lo hicieron fue aprovechando algún pequeño error y acertando sin que Aitor pudiera hacer nada para evitarlo.
La sensación que teníamos siempre es que en caso de subir un poquito el nivel de exigencia podíamos ganar el partido. El primer gol fue en una buena jugada en la que intervinimos todos y que culminó Héctor a pase de Rubén con una diagonal de las suyas hacia la izquierda y remate con la zurda que se tragó el portero (esa jugada tiene “algo” que la convierte en letal, empate a 1). Y el segundo un bien tiro de Rubén a pase de Héctor en saque de falta (empate a 2). Y el tercero una contra en la que Roberto cedía a Héctor y éste lanzaba un obús tierra-aire ¡¡¡vaya breva desde 15 metros!!! que si en lugar de colarse por toda la escuadra sigue subiendo derriba algún aeroplano (empate a tres) :P
El partido acabó en empate porque no nos atrevimos a arriesgar más, por exceso de precaución y por dormirnos a la espera de nuestro momento, que nunca llegó. Ellos con sólo tres buenos jugadores se limitaron a tocarla y no perderla y sólo con su pivote (uno bajito muy rápido) hicieron todo el daño que tenían que hacer. El empate nos puede valer, pero a veces hay que arriesgar y puede que este partido fuera una de esas veces.
Como bien dice Rigüi el fútbol es “un estado de ánimo” y Artipyme después de un final de liga sensacional con siete victorias consecutivas habíamos jugado un play off mediocre en ataque, sin suficiente gol (la ausencia de Rubén se notó en exceso) así que presentarnos a este partido “en cuadro” provocó quizás demasiados recelos y un exceso de precaución. La consigna era meternos atrás y salir a la contra y nos topamos con un equipo al que esto le venía muy bien.
El peso del partido lo llevaron ellos, que eran quienes tocaban, quienes nos hacían correr, quienes tenían la posesión. Inicialmente eso nos venía bien, siempre lo ha hecho, porque cuando cometen un fallo nuestras contras son letales pero en esta ocasión no fue positivo porque no perdían el balón y nos desgastaban física y mentalmente.....la tónica en todos nosotros era saber que éramos superiores, pero esperando “nuestro momento” fue pasando el tiempo hasta que ya no hubo.
Otra ventaja con la que contaron fue la de ir siempre por delante en el marcador. En el minuto 3 se ponían por delante y marcaban ya la tónica de todo el partido pues repitieron en el doce y en el seis de la segunda parte, siempre para sacarnos un golito. Sólo tiraron cuatro veces a puerta, pero cada vez que lo hicieron fue aprovechando algún pequeño error y acertando sin que Aitor pudiera hacer nada para evitarlo.
La sensación que teníamos siempre es que en caso de subir un poquito el nivel de exigencia podíamos ganar el partido. El primer gol fue en una buena jugada en la que intervinimos todos y que culminó Héctor a pase de Rubén con una diagonal de las suyas hacia la izquierda y remate con la zurda que se tragó el portero (esa jugada tiene “algo” que la convierte en letal, empate a 1). Y el segundo un bien tiro de Rubén a pase de Héctor en saque de falta (empate a 2). Y el tercero una contra en la que Roberto cedía a Héctor y éste lanzaba un obús tierra-aire ¡¡¡vaya breva desde 15 metros!!! que si en lugar de colarse por toda la escuadra sigue subiendo derriba algún aeroplano (empate a tres) :P
El partido acabó en empate porque no nos atrevimos a arriesgar más, por exceso de precaución y por dormirnos a la espera de nuestro momento, que nunca llegó. Ellos con sólo tres buenos jugadores se limitaron a tocarla y no perderla y sólo con su pivote (uno bajito muy rápido) hicieron todo el daño que tenían que hacer. El empate nos puede valer, pero a veces hay que arriesgar y puede que este partido fuera una de esas veces.
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