Pabellón La EnseñanzaSábado 29/03/2008
16:00 horas
Jugaron: Aitor, Roberto, Capi, Héctor, Sergio, Víctor
Goles: 4Víctor, 3 Sergio, 2 Héctor, 2 Capi
Asistencias: 2 Capi, 2 Roberto, 2 Héctor, Víctor, Sergio
A falta de dos partidos para acabar la liga con todo prácticamente decidido y sin ninguna presión este enfrentamiento estaba completamente descafeinado y quizás por eso ellos se presentaron con un equipo completamente distinto al de la ida, con chavales jóvenes que probablemente han jugado el último tramo de la liga con ellos y a los que falta aún experiencia en competición.
En el minuto cinco ya íbamos ganando 2-0 merced a dos goles de Víctor a pases de Héctor y Capi y al poco marcaba un tercero recogiendo un rechace del portero a disparo de Héctor. Parecía que Víctor iba camino de repetir su hazaña de los ocho goles contra Excavaciones Lizalde.
La verdad es que, sin menospreciar a nadie, y siendo realistas se pudo meter un saco de goles porque ocasiones hubo muchas, casi siempre en jugadas en superioridad tras robos de balón en el medio campo, donde morían todas sus jugadas y si no se metieron más goles fue porque no estuvimos finos (sí, suena prepotente decirlo, pero es la verdad). Si en lugar de querer jugar con velocidad en los últimos metros se hubiera tocado más el balón y jugado más lento y más al pie habríamos metido más goles porque con los pases destrozábamos su defensa. Cuando se eligieron opciones sencillas se acertó siempre.
En la primer parte aún hubo tres goles más. De Capi a pase de Roberto, de Héctor a pase de Víctor nada más sacar de medio campo tras gol suyo y al final en un penalti que transformé tras una jugada en la que caí trastabillado pero que no era falta si no se tiene en cuenta la intención (tocarme no me tocó).
En la segunda parte dominio absoluto por nuestra parte con ellos ya derrotados y dejando demasiados espacios en su campo. Esa era la clave, teníamos espacio para recibir fácil porque no encimaba, teníamos espacio para correr y para combinar y simplemente imponiendo un ritmo alto de juego los desarbolábamos. Todo el rato era igual, robo atrás de Capi, Roberto, Héctor y a correr hacia arriba. Si nos la jugábamos en individual se terminaba fallando y si tocábamos el balón terminaba dentro.
Nada más comenzar metí yo el séptimo tras robar un balón, el octavo en una contra en la que Héctor cede a Capi que marca de medio tacón, el noveno mío tras pase de Capi, el décimo en una contra rápida iniciada por Aitor que me sirve con todo el campo por delante para ceder el gol a Héctor y el undécimo y último de Víctor tras pase de Roberto en una buena combinación de toques rápidos arriba.
Lo dicho, partido sin historia, muy limpio y sin ninguna tensión. A buenas horas mangas verdes.
¿Volvió a marcar Víctor gracias a los cigarritos de la risa por la despedida de Dani? No sé, pero vaya risa floja la suya y de Aitor jejeje ;)
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